La nueva mano derecha de Vladimir Putin tiene un historial de violencia “totalmente despiadada” e incluso puede ser responsable de los atentados mortales de hoy en Ucrania .
Por Daily Star
Traducción libre de La Patilla
El general Sergei Surovikin, de 55 años, fue nombrado “comandante de la Agrupación Conjunta de Fuerzas en las áreas de la operación militar especial” el sábado (8 de octubre).
Solo unos días después (10 de octubre), una devastadora serie de explosiones golpeó varias ciudades ucranianas y mató al menos a 11 personas, aunque el número real de muertos probablemente sea mucho mayor.
Surovikin tiene una reputación temible y poca consideración por la vida civil, afirman los expertos, y el Ministerio de Defensa británico afirma que su carrera “ha estado plagada de acusaciones de corrupción y brutalidad”.
El general incluso tiene una serie de controversias criminales a su nombre después de que fue acusado de ordenar a las tropas que abrieran fuego contra un grupo de manifestantes a favor de la democracia en Moscú cuando la Unión Soviética cayó en 1991, matando a tres personas.
El comandante hambriento de sangre pasó seis meses tras las rejas, pero luego fue liberado sin juicio.
Recibió otra sentencia de prisión después de que fue declarado culpable de robar y vender armas en 1995, pero lo dejaron en libertad gracias a las acusaciones de que fue incriminado.
Putin también le encomendó a Surovikin que comandara sus tropas durante la intervención de Rusia en la guerra civil siria en septiembre de 2015, donde fue acusado de supervisar una brutal serie de bombardeos que destruyeron una gran parte de la ciudad de Alepo y lo llevaron a Lista de comandantes de Human Rights Watch “que pueden tener responsabilidad de mando por violaciones”.
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